Capitulo Uno. " El Nombre Escrito en la Arena ".

 Al principio fue un susurro...

No venia de fuera, sino desde dentro, desde lo mas hondo de un silencio que había acompañado a esta alma por siglos, era como una vibración olvidada, el eco de un nombre que la boca moderna no sabia pronunciar, pero que el corazón reconocía con una mezcla de asombro y nostalgia; "NEFER SETKME".

Cada vez, que mi mirada se posaba en un jeroglífico, una pintura mural o una estatua de ojos alargados y porte real, algo se encendía en mi pecho, no era simple admiración, era memoria.

Soñaba con arenas tibias bajos mis pies descalzos, con el murmullo del Nilo besando las orillas. el viento traía aromas de incienso y una luna inmensa flotaba sobre un templo blanco. y siempre, en esos sueños, había una mujer majestuosa, de cuello largo y mirada sabia. "NEFERTITI", no como reina sino como una alma antigua, que me miraba con ternura y una tristeza callada.

Desde niño la sensación había estado allí, mientras otros jugaban yo escribía en la tierra, dibujaba símbolos sin saber su significado, soñaba con palabras que no pertenecían a mi lengua, pero que sentía como propias. KA (fuerza vital), BA (fuerza espiritual que representa a la personalidad de un difunto, se le solía representar como un pájaro con cabeza humana), AKH (simboliza el renacimiento y resurrección en otra vida). los nombres de las partes del alma según los egipcios. ¿como podía saberlo sin haberlo aprendido?

Una vez en un museo me detuve frente a una pequeña estatuilla de ISIS. mis ojos se llenaron de lagrimas sin entender porque, sentía como si la diosa me llamara a casa.

No estaba loco... estaba recordando.

Es el inicio de algo grande, el regreso de un alma antigua, mi alma en otra vida, en otra época. donde sin duda, era el despertar de NEFER SETKME, la que había sido sacerdotisa, sanadora y guardiana del misterio.

Y aunque el mundo moderno no crea en reencarnaciones, en mi ya era verdad, mi vida pasada había regresado y estoy dispuesto a contar mi historia.

Porque el alma no olvida, nunca olvida...

                                                                            Williams Ravello...